Nosotros

Muchos de nuestros visitantes nos preguntan de dónde viene el vocablo “TORUBIO” o “MAS DE TORUBIO”, y con orgullo les explicamos que ése es el término con el que se conocía a nuestros antepasados, por lo que no cabía otro nombre posible para la tierra en la que y de la que vivían, “MAS DE TORUBIO” o “Masía de Torubio” en castellano.

Así, bisabuelos, abuelos, padres, hijos y nietos hemos ido dejando nuestra huella en este mágico lugar (pronto sabréis por qué) a través del tiempo, cuidando con mimo y trabajando con esmero cada palmo de “MAS DE TORUBIO”.

La familia Monreal Chasco somos la actual generación, familia vinculada a la producción agraria desde nuestros ancestros; y que a finales del siglo pasado decidimos plantar las primeras viñas con el firme propósito de dar sostenibilidad y equilibrio a nuestro modo de relacionarnos con este privilegiado entorno, de tal manera que generaciones posteriores puedan seguir trabajando la misma tierra que nuestros antepasados y nosotros mismos trabajamos hoy en día.

Nuestra filosofía se basa en el respeto por esta porción de tierra milenaria, conservando su fertilidad mediante abonados orgánicos y cubiertas vegetales, sirviéndonos además de respetuosas alianzas con la flora y fauna autóctonas, y obviando siempre el uso de herbicidas o insecticidas.

Siguiendo la premisa de que el buen vino se hace en la viña, y combinando el comentado respeto a la naturaleza con determinadas técnicas y con nuestra sapiencia e intuición, podemos plasmar la esencia de esta tierra en nuestros vinos, que son acompañantes indispensables en el perfecto maridaje con la gastronomía del Matarraña. Un vino hecho con el propósito de expresar la emoción auténtica y el verdadero carácter del lugar.

Trabajar la viña de forma respetuosa para mantener y mejorar su calidad de manera natural supone también un principio y pilar fundamental a nuestro compromiso de conservación y mejora del entorno.